Crónica del penúltimo partido

La araña negra volvió a aparecer (tarde, como siempre) para salvar a su equipo de

una goleada que ya se intuía por parte del público (numeroso) y del equipo rival. Sus providenciales paradas antes los cabezazos y arteros disparos de los delanteros estuvieron a punto de causar un estallido de nervios entre los delanteros. Afortunadamente pudieron superar esa crisis y remontar el vuelo.

Ante la avalancha del quinteto (Rodolf, Moha, Bilal, Estrada y Zidane) que desarrolló un apabullante nivel de juego, el equipo de la araña negra no tuvo más remedio que convertir a su defensa en un frontón. Utilizaron como es habitual las inicuas artes (propias de los malos perdedores) de forma que escamotearon un clarísimo penalty cometido sobre Zidane y no dudaron en recurrir a la violencia para detener las peligrosas incursiones de los extremos.

Mención aparte merece el  maraña pues ya sólo le faltan 24 intentos para marcar un gol, siempre y cuando que Zidane le siga suministrando pases inverosímiles que le dejaban franco el camino hacia la portería. Pero no se debe desanimar, a Rodolf sólo le quedan 37 intentos... Sólo acierta con  las patadas que le propina a Zidane cuando está indefenso en el suelo.

En el equipo rival, con el transcurso del partido, los ánimos fueron menguando y finalmente no le quedó más remedio que asumir humildemente la superioridad del equipo zidanista. Los esfuerzos defensivos de  Román, Aniol, Marc y de Pep fueron en balde... y tendrán que esperar una semana para desafiar a su triste destino...